DEMDIKE STARE es un proyecto formado por dos insaciables coleccionistas de vinilos con sede en Manchester: Sean Canty y Miles Whittaker,productores de la vieja escuela que decidieron unir sus fuerzas en 2009 para darle vida a esta interesante y misteriosa aventura sonora de ocultismo y beats esotéricos.
El concepto de su propuesta (en este álbum triple) esta basado en el empleo de drones y bajos para crear atmósferas que no dejan escapar la luz, evocando espacios tétricos, pero que en ningún momento dejan de ser extrañamente cálidos, sensuales y acogedores, puesto que Demdike Stare no pueden evitar dejar entrever el entusiasmo con el que ensamblan estos paisajes sonoros, tomando elementos de aquí y allá para conseguir que su música represente las imágenes a las que podrían acompañar. Así, su peculiar drone-dub-techno da lugar a momentos memorables, como “Repository Of Light”, en la que además demuestran su atención al detalle más algún elemento proto-techno en la línea de Manuel Göttsching, el ambient industrial de “Rain And Shame” o las dos majestuosas caras de “Forest Of Evil”. La rítmica de otras culturas es otro elemento recurrente, que recuerda a esas películas de terror con inquietantes elementos sobrenaturales de procedencia oriental o africana –sería el caso de, por ejemplo, “Desert Ascetic”, que es un auténtico pandemonio psicodélico, o “Hashshashin Chant” (hechale un vistazo a su revelador vídeo, compuesto de imágenes procedentes, cómo no, de películas de terror), así como de algunos pasajes de “Dusk”, “Dawn” y “Bardo Thodol”.
La trilogía en vinilo editada en 2009 por Demdike Stare se completa ahora con la edición en triple CD con bonus tracks.
El resultado es una de las grandes obras maestras de la nueva música esotérica.
Junto a Voigt y a Shackleton hay quien señala a Demdike Stare como uno de los grandes nombres del techno contemporáneo: todos ellos tienen en común establecer diálogos entre el techno y la naturaleza, bien sea a través del ambient, elementos rítmicos tribales, o ambas cosas al mismo tiempo, y todos ellos han conseguido perfeccionar una obra personalísima, algo alejada de la pista de baile pero interesantísima a la hora de abrir, desde Europa, nuevas vías de expresión para esta música.DEMDIKE STARE es un proyecto formado por dos insaciables coleccionistas de vinilos con sede en Manchester: Sean Canty y Miles Whittaker, productores de la vieja escuela que decidieron unir sus fuerzas en 2009 para darle vida a esta interesante y misteriosa aventura sonora de ocultismo y beats esotéricos.
El concepto de su propuesta (en este álbum triple) esta basado en el empleo de drones y bajos para crear atmósferas que no dejan escapar la luz, evocando espacios tétricos, pero que en ningún momento dejan de ser extrañamente cálidos, sensuales y acogedores, puesto que Demdike Stare no pueden evitar dejar entrever el entusiasmo con el que ensamblan estos paisajes sonoros, tomando elementos de aquí y allá para conseguir que su música represente las imágenes a las que podrían acompañar. Así, su peculiar drone-dub-techno da lugar a momentos memorables, como “Repository Of Light”, en la que además demuestran su atención al detalle más algún elemento proto-techno en la línea de Manuel Göttsching, el ambient industrial de “Rain And Shame” o las dos majestuosas caras de “Forest Of Evil”. La rítmica de otras culturas es otro elemento recurrente, que recuerda a esas películas de terror con inquietantes elementos sobrenaturales de procedencia oriental o africana –sería el caso de, por ejemplo, “Desert Ascetic”, que es un auténtico pandemonio psicodélico, o “Hashshashin Chant” (hechale un vistazo a su revelador vídeo, compuesto de imágenes procedentes, cómo no, de películas de terror), así como de algunos pasajes de “Dusk”, “Dawn” y “Bardo Thodol”.La trilogía en vinilo editada en 2009 por Demdike Stare se completa ahora con la edición en triple CD con bonus tracks. El resultado es una de las grandes obras maestras de la nueva música esotérica.Junto a Voigt y a Shackleton hay quien señala a Demdike Stare como uno de los grandes nombres del techno contemporáneo: todos ellos tienen en común establecer diálogos entre el techno y la naturaleza, bien sea a través del ambient, elementos rítmicos tribales, o ambas cosas al mismo tiempo, y todos ellos han conseguido perfeccionar una obra personalísima, algo alejada de la pista de baile pero interesantísima a la hora de abrir, desde Europa, nuevas vías de expresión para esta música.(delirios personales.com)